Pequeñas bombas en mi vida.

Me alimento de la música, compuesta de versos; son como bombas a pequeña escala que, no rompen cualquier cosa y de cualquier manera, sino que rompen puertas cerradas que deberían estar abiertas, rompen recuerdos que no merecen existir, los días sin actitud de vivir.

viernes, 29 de agosto de 2014

Me hace gracia.

Me hace gracia que penséis que la vida es color de rosa, que nunca vais a tener que tomar esa puta decisión que sabes que hará daño a alguno de los dos.
Me hace gracia que presumáis de lo que no tenéis, que lloréis lo que nunca quisisteis y que echéis de menos lo que nunca valorasteis.
Me hace gracia que queráis vivir la vida como los demás y no a base de ideas propias, que importe más lo que debe importar menos.
Me hace gracia que pidáis perdón sin sentirlo, que mezcléis sentimientos y que la victoria sea siempre, hacer sentir mal al otro.
Me hace gracia que os quejéis de lo que vosotros mismo hacéis. De las idas y venias, las sonrisas falsas y los amigos por compromisos.
Me río de vosotros porque la vida me ha enseñado que lo que verdaderamente vale, es lo que no abunda; y sois los tontos que acabáis siendo copias unos de otros.

martes, 26 de agosto de 2014

(im)posible

Recuerdo aquel día como si hubiese sido ayer, dos personas frías caminaban de la mano por compromiso por las calles de este pueblo, sin rumbo, sin ganas, intentando evitar discutir. Ya no era la misma, tú me habías cambiado, habías sacado lo peor de mi, me recuerdo y me doy asco. Todo se había roto meses antes, desde aquel día que cerré la puerta sin decir adiós y no te llamé para arreglar las cosas, desde aquellas madrugadas llenas de llamadas y mensajes, desde aquellos gritos en los portales, y aquellas huidas con los ojos encharcados de lágrimas. Todo había cambiado, ya no te quería, ya no me querías, ya no nos queríamos, era un amor odio. Me había cansado de sangrar por los dos, me había cansado de confiar en sus promesas, de seguirte los pasos, de llorar en tus brazos cuando eras tú quien me estaba matando poco a poco. Y aquel día, oh sí, aquel día me coroné, recogí todos mis trozos, todos mis sueños rotos, y decidí recomponerlos, ya no me hacías falta, ya no te quería en mi vida. No hay cosa de la que me sienta más orgullosa que de ese. El día en el que decidí pensar en mi antes que en nadie.
Le dije que no volvería a partirme los nudillos en ninguna pared blanca, que no mancharía mi nombre escupiendo verdades de mala manera, que a pesar de caerme volvería a levantarme entera, ya no me hacías falta, o quizá sí pero no quería que me la hicieras y pensaba conseguirlo. Me había convertido en lo que más odiaba y eso iba a cambiar. Te fuiste a la mierda, dónde merecías estar, y ahora mírame, me he convertido en todo lo que quería ser. Puedo cruzarme contigo sin sentir nostalgia, sin sentir pena, sin pensar en el pasado, puedo hacerlo, eres una persona más entre la multitud. Que te jodan, hoy soy feliz.



domingo, 24 de agosto de 2014

(De)sastre de sonrisas.

Rompiste mis esquemas, mis planes, mis pensamientos, mis ideas, mis normas, lo rompiste todo cuando llegaste a mi vida y sin permiso. Todas las normas que había puesto en mi vida, todas las promesas que me había prometido a mi misma, todos mis esquemas, todo, lo rompiste. 
Y sin darme cuenta me vi despertando a tu lado, y me sentí más feliz que nunca, me sentí completa, me sentí llena, porque a puesto mil vidas y no muero ni una a que nada es capaz de ser más bonito que tú recién levantado. Porque desde que llegaste a mi vida todo ha cambiado, ya no necesito ir a buscar la sonrisa en la recamara que nunca falla cuando la mía desaparece sin avisar, porque contigo la sonrisa nunca se va, y si se va es para jugar al escondite a base de segundos. Quiero seguir siendo yo la que tenga la oportunidad de verte a sí todas las mañanas, quiero tener el placer de hacerte feliz, y sufrir a al vez. Quiero ser yo el sentimiento amor de tu corazón y el odio de tu mente. Porque sí estoy enamorada de ti, y joder, no te has quedado corto. No me gusta reconocer estas cosas, lo odio, pero eh, daría mis sonrisas porque las tuyas salieran a flote. Y quiero, no te lo niego, quiero ser esa chica que te haga dudar de todo, porque ella es lo único que tienes claro. Y qué joder, que no te vayas nunca, tío. Que no puedo sin ti. Que sin ti los días me superan. Que sin ti no siento a este de la izquierda. Que soy tan tuya, como tú tan mío. Que prefiero morir que verte en brazos de otra. Dime que te quedas, que quieres quedarte, que deseas con todas tus fuerzas que sigamos siendo los dueños de la lluvia, que quieres que sea siempre nuestra, que he roto tus esquemas, que no quieres perderme. Dime que quieres que me quede para siempre. Dímelo.


martes, 19 de agosto de 2014

Invierno.

Hoy siento algo que pensaba que nunca sentiria en una tarde de verano en pleno Agosto y disfrutando de mis vacaciones en la playa. Sí, hoy me apetece una tarde fría de Invierno, una de esas tardes en las que el corazón se te encoje y la mente te da giros hasta quedarse en modo nostálgico. 
Hoy me encantaría que fuese una de esas tardes en las que llevar dos sudaderas para salir a la calle no fuese suficiente para dejar de tener frío, y en las que salir a caminar con los cascos puestos y mi rap a toda hostia mientras voy a recorrer cada esquina de mi querido pueblo fuese lo único que me aliviara.
Hoy echo de menos una tarde como esas, en las que después de llegar a casa me tumbara en el sofá a ver cualquier pelicula romántica y que solo un cafe con leche hirbiendo en las manos me calmara la velocidad de los latidos que se esconden detrás de mi pecho izquierdo.
Supongo que hoy, echo de menos echar de menos.


Heridas de placer.

París no es la ciudad más bonita del amor, tan sólo es una copia barata que han intentado hacer reflejando uno de nuestros besos después de verte sonreír. Y que se joda Madrid cuando la única manera de llegar al cielo sea verte dormido al despertar.  Se dice que en Berlín hace muchos años se tiraron muros pero es que no han visto como te ríes de cada uno de mis monstruos, eso si que es derribar a los miedos, a mis miedos. Que todos los caminos lleven a tu boca en vez de a Roma, que le jodan. Yo me quedo con tus ruinas. Y que si, quizá es cierto que Venecia esta llena de agua y es preciosa cuando también se llena de góndolas pero que ninguna lleva al mar de tus ojos. Y eso es como navegar sin rumbo. Que el mundo no sabe ni entiende nada de metas, no te ha oído hablar de futuros viajes inciertos pintados de despreocupaciones.Viajar a tu lado sera suficiente para que Grecia no entienda de dioses, no te va a ver desnudo haciéndome inmortal cada noche. Que quiero que te quedes, que seas todas mis ciudades. Hagamos del roce de tus manos el mejor idioma que mi cuerpo analfabeto desconoce. No quiero un final feliz, quiero un ''ahora'' contigo, dejemos el infinito para las matemáticas.

Nunca hay dos gotas de agua iguales.

Otra de tantas que no puede olvidar el pasado y que le tiene miedo a los despegues, pero no a los despegues de aeropuerto, si no al de las personas que aparcan sin permiso en tu vida por razones 'temporales' y luego se marchan. La música es lo único que me salva y me lleva a ese mundo que ni siquiera existe, o eso dicen. Me emociono y lloro con facilidad, pero nunca se me ve sangrar de verdad. Siempre sonrío, aunque no quiera. Quiero hacer felices a los demás antes que a mí misma. Vivo enamorada de sus sudaderas suaves, de su pelo, su sonrisa y sus "Mi vida" y digo sus ''Mi vida'' porque seguramente sea la única palabra que solo me dedica a mi, y no tenga que compartirla con ninguna de sus amigas. ¿19 de Abril? Un buen día para cumplir años, ¿no crees? Por cierto, gracias mamá por hacerme como soy.

lunes, 18 de agosto de 2014

A veces, solo a veces, o quizá muchas de las veces, existen cosas, o más bien lugares y sitios, o simplemente huecos, o tan solo algo que esta cerrado, que alguien alguna vez lo cerro, porque dentro hay algo valioso, o algo guardado, o algun secreto, o un sentimiento, o simplemente un deseo. Porque cada persona decide lo que cierra, y tambien decide si compartirlo o no, si quiere que alguien lo abra, o si nadie quiere que se cierre.


Llaves y cerraduras, que combinacion tan extraordinaria, miles y miles de llaves en el mundo, millones y millones de cerraduras, algunas perdidas bajo tierra, otras en el fondo del mar, y otras en el bolsillo de esos pantalones que dejaste de ponerte hace años porque dejaron de gustarte.

Pero abrán muchas llaves que nunca llegaras a encontrar y también muchas cerraduras que nunca llegaras a abrir. Porque quizá no tienes que hacerlo, porque quizá no es para que tú las abras, o quizá porque quién las cerró deseo que nadie la volviera a abrir jamás.

miércoles, 6 de agosto de 2014

He vuelto a hacerlo.

He vuelto a hacerlo, he vuelto a sentirlo, he vuelto a valorar el significado de la palabra amar. He vuelto a confiar en alguien, y en confiar en mí misma, he vuelto a hacer todo aquello que no creía que volvería a conseguir, o quizá sí, pero no creía que lo haría con tanta fuerza, con tantas ganas como lo hago ahora. He vuelto a ser feliz, a dejarme llevar, a cuidar a alguien, a valorarle, a hacerle sonreír.


Y todo comenzó hace ya muchos meses, no creía que iba a lograrlo, que idiota fui en aquellos días de verano dónde solo existía la lluvia para nosotros dos. Pero eh, estoy aquí, contigo, estamos aquí. Y me gusta sentir esta sensación, la sensación de sentir que cada día que pasa me enamoro más de tu risa, de tus pestañas, de tu pelo, de tu mirada, de tus marcas, de lo bien que te queda la barba, de tu espalda, de tus manos, de tu caminar, de tus pasos, de tus ideas, de tus besos... y de todo aquello que tenga que ver contigo. Porque eres único cariño, porque solo tú sabes hacer feliz mis días aunque el cielo no sea azul.  

He vuelto a entregarlo todo, he vuelto a memorizar una fecha, he vuelto a estar dispuesta a tragarme todos sus problemas, he vuelto a estar aquí. 

He vuelto a sonreír.

Cicatrices.

Estoy en una de esas noches de verano normales, tranquilas, como todas esas noches de verano que te marcan para toda la vida, no por todos los momentos buenos, con amigos, con familia, de vacaciones o de fiestas, mas bien por situaciones algo incomodas que se viven a lo largo de tu vida... 

Situaciones que te hacen marcar un antes y un después en ella, que te hacen pensar en un ahora, que te obligan a crear una nueva manera de sentir, de pensar, de enfocar la vida, de enfocar el futuro, más bien ya no piensas en tu futuro, no al menos en todo lo que solías pensar antes cuando escuchabas esa palabra. Todo es diferente, todo ha cambiado en un solo segundo, ahora una persona pasa a ser parte de tu recuerdo, de manera egoísta y de injusta.

Pero en estas situaciones aprendes muchas cosas, sobre todo a ser fuerte, no porque quieras, si no porque la misma vida te obliga a serlo, a valorar las cosas, a valorar sobretodo a las personas, al querer de una madre por muy distinta que sea su manera de ser comparado con lo que se suele pensar cuando se trata de ser madre.

Pero eh, la vida sigue, la suya quizá no porque ella lo decidió así pero la tuya, la vuestra, la nuestra, esas  siguen. Y ahora, es lo único que importa.